Los uniformes, la cara de nuestra empresa, nuestra tarjeta de presentación, muy importantes y en la mayoría de las veces sirven como el indicador de cada miembro dentro de la institución.

Sin embargo, es normal que las empresas se encuentren con el hecho de que deban cambiarlo tan pronto, porque se degastan en menos tiempo del que se estimaba.

Sabemos que no podemos tener control sobre cada empleado para poder vigilarle sobre las indicaciones de lavado y trato oportuno de la prenda, pero si podemos pensar en todas las variantes que podrían surgir a la hora de solicitar la confección de uniformes con bordado textil.

Si logramos identificar todas las necesidades que requerimos suplir, encontraremos la forma de lograr el uniforme deseado, y con suerte ya no tengamos que cambiarlo cada 4 o 6 meses, sino más bien lograr la utopía de casi todas las empresas: un uniforme eficazmente durable por más de un año.

Además de garantizarle a nuestros empleados la seguridad de que visten prendas que los protegen (como es el caso d las prendas qe utilizan químicos inflamables).

La diferencia entre una prenda que no se adhiera a la piel en caso de incendio con respecto a una que si es  realmente significativa cuando de seguridad y precaución se habla.